Fuerza Deformativa: ¿Se atreven a soñar?

Como en escaparatedf también queremos abordar el análisis de la realidad política de nuestro país, Nestor Leandro, periodista y coordinador de entrevistas e invitados del programa En los Tiempos de la radio, traerá periódicamente un artículo donde desenmarañará ciertos asuntos relacionados con la polaca y los medios de comunicación. No olvides dejar tu comentario y expresar tu valiosa opinión.

Por: Nestor Leandro
nestone@hotmail.com

En días anteriores me ha sorprendido la poca opacidad de los medios de comunicación ante un hecho nada nuevo y ya de antemano conocido: la ignorancia y poco criterio del conductor Esteban Arce para tratar de abordar un tema que, cabe destacar, tenía mas de un mes de haberse discutido en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal y que ante la falta de información en los primeros días de enero debido a que todo mundo se encuentra de vacaciones y no había nada que meter para contenido en los noticiarios y planas de los diarios, cobró una fuerza sólo comparable a los sketchs de Juanito, sí, el gran ganador-perdedor de Iztapalapa, y que esta completamente perdido en la sola idea de tener las piernas de Maribel Guardia cerca, ése.

Es sorprendente que en los medios de comunicación y en las redes sociales se pida la cabeza de un conductor que sólo es un relleno de un pequeño programa que acompaña al telespectador para poder pasarse la torta con un atole durante las mañanas, por el simple hecho de mostrar su homofobia y más aún, ¡cuándo ese programa ni siquiera pertenece a las emisiones de enero sino que fue grabado en el mismo mes de diciembre de 2009!

¿Por qué hemos de sentirnos ofendidos porque un conductor de programas cómicos se exprese de una manera tan gandul y “antidemocrática” al mostrar su desaprobación al matrimonio gay y a su respectiva adopción de menores? No recuerdo que durante su estancia en el legendario “Calabozo”, que se transmitía en Telehit y en Canal 5 durante la década de los noventa, alguien haya pedido la cabeza de Arce y su patiño Van Rankin cuando atentaban contra los derechos de la niñez, al burlarse de la pobreza de los niños Lencho y Ambriz, al preguntarles diariamente si habían comido frijoles y hacían mofa de su apariencia física y vestimenta. Al contrario, era aplaudido y causaba gracia entre un gran sector de la audiencia. ¿Por qué tanto escándalo? ¿Acaso nos decepcionó el conductor con su última campanada? Todo mundo nos fuimos con la finta y compramos el chismesote…

Este mismo asunto de las bodas gays ha dado para más telenovelas exitosas en la farándula política, pues el clero en complicidad con el Partido Acción Nacional se han “Atrevido a soñar” con que el PRD en la capital derogue en la Asamblea Legislativa los matrimonios gays y las respectivas adopciones que de ellos deriven, si es su deseo hacerlo. Los panistas, clero y partidiarios de los ositos cariñositos están cegados por las buenas costumbres que nos infundió Cositas con su forma de dirigirse a los niños, pues no logran entender que esta reforma no es una aberración contra la naturaleza ni algo “anormal” en los legisladores de la capital.

Señores, es un triunfo del avance democrático a la que la sociedad se ha hecho merecedora, más no así de la clase política. El renocer los derechos de una minoría, que no es tan menor, y que también ha llenado las urnas en las elecciones tiene las mismas obligaciones como cualquier otro ciudano, no hay urnas especiales para gays o heterosexuales instaladas por el IFE ni mucho menos por el Instituto Electoral del Distrito Federal.

La adopción de menores por parte de personas gays no es nueva, se hace comúnmente desde hace tiempo y no es necesario acreditar la preferencia sexual ante el DIF para poder hacerse cargo de un niño, eso no existe. Si no lo creen, vayan a una dirección del DIF para llenar el formato y a las posteriores entrevistas y estudios socioeconómicos. Procuren regañar a quien les da la hoja y dé seguimiento al proceso por no condicionar en él que se tiene que ser heterosexual para poder guiar a un niño. Afortunadamente, la Ciudad de México es la Ciudad del Pecado en vías de la legalidad, muchos pecados son legales…

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Para seguir desvirtuando la realidad y adentrarnos más en una polémica surrealista que ni el mismo Salvador Dalí hubiera concebido, como bien diría el ex jefe de Gobierno desaforado, Andrés Manuel López Obrador, como chacalacas las dirigencias del PRD y del PAN entablan negociaciones para hacer alianzas en varios estados ante las elecciones de este año. El poderío del PRI en varios de ellos obliga a estos grandes antagonistas a olvidar las rencillas y tratar de formar un Frankenstain, que más bien se parece a un experimento fallido e inofensivo como lo fue el Conde Pátula, que no tendrá grandes dimensiones ni alcance. La ex titular de la Oficina para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas y funcionarias consentidas de Vicente Fox, Xóchitl Gálvez, es la manzana de la discordia al encabezar las preferencias electorales de la oposición en Hidalgo, algo que al PRD no le perjudica ni le beneficia, pero Obrador no dejará que esta propuesta pase, ¿Acaso Cuauhtémoc Blanco sería bien visto con la playera del Guadalajara con el estadio Jalisco lleno? Creo que el tabasqueño sí entiende esta disyuntiva. A pesar de tanta bulla y unión de fuerzas, ni cosquillas le harán a la recién aceitada maquinaria del Revolucionario Institucional; ambos contrincantes están a punto de quedar desvielados…

El que se encuentra a punto de despertar es el secretario del Trabajo, Javier Lozano, quien en su letargo  que pronto será dado a conocer por los medios, cabalga en el lomo de Martín Esparza, líder del SME, tratando de alcanzar la candidatura del Partido Acción Nacional a la Presidencia de la República. Calderón inició su campaña exactamente hace seis años, uno antes de que iniciara el proceso interno del PAN, el cual curiosamente ocurrirá de nuevo en un año, y no es de extrañarse que el verdugo de Luz y Fuerza del Centro quiera ganar por más de una cabeza; pero se encuentra con un pequeñísimo problema que bien podrían explicar unas líneas inspiradas en Augusto Monterroso: “Y cuando despertó, el Secretario de Educación Pública, Alonso Lujambio, seguía allí…”

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